Dónde irán…

jueves, noviembre 12, 2009

Se estiran.
Se alargan,
como los cuellos de los cisnes
que buscan su sueño en océanos oscuros.
Parten de nuestros labios
como pedacitos de lava recién formada
y se van apagando en la distancia.
Dejaron ya de pertenecernos…
Sólo somos dueños de un instante fugaz,
apenas una fracción de segundo,
efímera posesión de lo inmaterial.
Se olvidan.
Quedan petrificadas en tiempo
y lentamente se desintegran.
Igual que nuestros cuerpos
.

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